La moxibustión es una técnica de la medicina tradicional china que se utiliza como complemento en la acupuntura. Es muy efectiva y tiene el cometido de equilibrar la energía del cuerpo y sanar diversos trastornos y enfermedades que tengan su origen en ese desequilibrio que se pretende subsanar.
En la actualidad, la moxibustión es capaz de curar muchas dolencias, pues su poder sanador es muy potente. Sin embargo, su aplicación puede hacer aflorar algunos miedos y dudas sobre posibles consecuencias o dolores que pueda causar. Algo sobre lo que arrojaremos luz a lo largo de este artículo.
¿Cómo se aplica la moxibustión?
La moxibustión utiliza el calor como su mayor aliado. Para ello, se utiliza un puro de moxa (planta artemisa) el cual se puede utilizar con las agujas o directamente sobre la piel. Esto, sin duda, causa mucho recelo, pues la mayorías de las personas piensan que les dolerá mucho o que les abrasará la piel.
Ante esto es necesario decir que su aplicación en conjunto con las agujas no produce ningún efecto adverso. De hecho, esta técnica combinada con las agujas potencia la estimulación de los puntos que conseguirá en efecto buscado.
¿Qué ocurre cuando se aplica directamente sobre la piel? Solamente hay una técnica que no es muy utilizada pues provoca pequeñas quemaduras en la piel, aunque sus beneficios son enormes. Hay varias técnicas de moxibustión, ¿te gustaría descubrirlas?
Los beneficios de la moxibustión
La moxibustión utiliza los mismos puntos de la acupuntura para tratar las diferentes dolencias a las que está destinada. Sin embargo, es necesario que arrojemos luz sobre algunos de sus beneficios que, como podremos observar, son numerosos.
- Alivia dolores articulares como la artrosis.
- Es una excelente aliada para trata problemas menstruales.
- Ayuda a paliar los síntomas del estrés y la ansiedad.
- Mejora los problemas de circulación.
- Estimula el sistema inmunológico.
- Favorece la producción de hemoglobina.
Además de estos beneficios, es necesario detenernos a explicar aquellos que tienen relación con problemas de infertilidad y el embarazo. La moxibustión puede ser un excelente aliado para aumentar la fertilidad y conseguir que los tratamientos que se están utilizando para poder concebir tengan un complemento muy potente y natural que les dé un empujón para tener un resultado exitoso.
Asimismo, cuando ya hemos concebido, la moxibustión está especialmente recomendada a aquellas madres cuyo feto tiene una mala posición dentro de la barriga que puede provocar que nazca de nalgas. Se recomienda su uso en el tercer trimestre de embarazo.
Como curiosidad, es necesario mencionar que la moxibustión también se aplica a animales. La acupuntura no solo tiene como destinatarios a las personas, sino que también es efectiva en animales, en especial, bovinos, caninos, felinos, equinos y aves. Esta técnica no resulta dolorosa, peligrosa ni agresiva para ellos. Es más, les sugiere múltiples beneficios para paliar sobre todo cualquier tipo de dolor crónico que pueda estar mermando su calidad de vida.
¿En qué casos la moxibustión no está recomendada?
Hay algunas ocasiones en las que esta técnica no se podrá llevar a cabo, debido a que se pondrá en riesgo el bienestar del paciente y, también, porque quizás no se logren obtener los resultados buscados. Así, por ejemplo, si el paciente se encuentra con fiebre, trabajar con esta técnica que implica calor no será nada beneficioso.
De igual manera, si nos encontramos con heridas o alguna úlcera que se encuentre en un punto específico que debe tratarse, es imprescindible dejar que la llaga sane. Asimismo, por precaución, la moxibustión nunca debe utilizarse en ojos, oído, boca, nariz, cara o pechos.
Ahora que sabes más sobre la moxibustión, ¿te animarías a probar alguna sesión?