Consejos para curar y tratar la gastritis de un modo natural

Entre los problemas que más suelen afectar a nuestro sistema digestivo podemos encontrar la gastritis. La gastritis hace que el revestimiento de nuestro estómago resulte hinchado o inflamado debido a virus o bacterias, por el consumo de ciertos fármacos, por beber alcohol, u otros factores en relación con las malas pautas en nuestra alimentación.

El estómago es uno de los órganos más importantes del tubo digestivo. Produce aproximadamente dos litros de jugos gástricos al día y algunas hormonas que cumplen una importante labor para nuestro cuerpo (gastrina, histamina, endotelina, etc.).

La aparición de la gastritis está provocada, sobre todo, por malos hábitos alimenticios. El abuso de determinados medicamentos (especialmente antiinflamatorios) puede producir gastritis. Además, la bacteria helicobacter pylori puede generar esta dolencia, aunque también puede surgir por el estrés o ansiedad prolongada.

Consejos para curar y tratar la gastritis de un modo natural

Los síntomas más comunes son: acidez, sensación de dolor y/o ardor en el abdomen, náuseas, indigestión, inflamación abdominal, intolerancia a algunos alimentos o vómitos. En la mayoría de los casos la gastritis no daña permanentemente el revestimiento del estómago.

Cuando se padece gastritis, son muchas las personas que eligen tomar medicamentos o antiácidos, aunque haya tratamientos comprobados ajenos a la industria farmacológica que ayudan a la hora de curarla de un modo efectivo.

A continuación, vamos a enumerar soluciones totalmente naturales que harán que la gastritis desaparezca progresivamente.

Para la acidez y la irritación estomacal, que es uno de los síntomas más comunes cuando se habla de gastritis, existen varios consejos que nos ayudarán para poder reducirlos de un modo satisfactorio:

  1. La infusión de jengibre disminuye el estrés y relaja los músculos del esófago, lo que ayudará a que el ácido del estómago no suba. También inhibe el crecimiento de las cepas de la bacteria helicobacter pylori.
  2. La patata, muy buena para la salud del sistema digestivo en general, ayuda a eliminar la acidez del estómago produciendo un gran alivio de los síntomas de la gastritis.
  3. La miel es un buen aliado a la hora de prevenir y disminuir la acidez del estómago, dado que contribuye a que las paredes estomacales se curen naturalmente. Tiene un efecto cicatrizante e impulsa la eliminación de los microorganismos patógenos que causan esta enfermedad.
  4. El zumo de limón también posee propiedades cicatrizantes, siendo por ello que puede sanar úlceras locales. Además, nuestro cuerpo detecta el ácido del limón en nuestro estómago, el cual, disminuirá la producción de los ácidos propios de la digestión que son los que provocan esos tremendos ardores de la gastritis.
  5. El Aloe Vera tiene numerosos beneficios para aliviar los síntomas de la gastritis: actúa como antimicrobiano; ayuda a tener un mejor tránsito; ayuda a reducir los daños gástricos; aporta grandes cantidades de aminoácidos, calcio y magnesio favoreciendo la salud estomacal. El Aloe Vera es un excelente analgésico y apoya la regeneración de los tejidos haciendo que estos se suavicen y pierdan su irritación.
  6. La gelatina es un formidable remedio natural para la gastritis, porque flexibiliza muchísimo las paredes del estómago, ayudando a combatir la acidez y las molestias que generan.

Consejos para curar y tratar la gastritis de un modo natural

El dolor de estómago causado por la acidez y la irritación estomacal, es uno de los síntomas más desagradables de la gastritis. Pero los dolores estomacales se pueden calmar de muchas formas haciendo uso de infusiones e ingredientes naturales.

Veamos como:

La infusión de regaliz aporta propiedades calmantes al estómago por dos razones significativas: es antiácido; y ayuda a generar mucosa gástrica. Pero esto no es todo. Esta infusión reduce la inflamación, mejora las digestiones y ayuda a cicatrizar (como la miel y el zumo de limón) las úlceras que tengamos. Además, el extracto de regaliz puede combatir la bacteria helicobacter pilory.

La infusión de manzanilla es conocida como una de los tratamientos más útiles para el cuidado del estómago, dado que ayuda al proceso de la digestión. Aporta muchos beneficios al sistema digestivo como: reducción de gases; mejora de la digestión; efectos calmantes y sedantes; aminoración de inflamaciones y afecciones gástricas; y protección y reparación de la mucosa gástrica.

La infusión de linaza es conocida por sus milagrosas propiedades a la hora de hacer la digestión. Es muy suavizante y alivia los malestares de la gastritis. Es muy recomendable si se padecen dolores fuertes después de comer.

El zumo de zanahoria es un antiinflamatorio natural, y además posee propiedades diuréticas que ayudarán en gran medida a que la gastritis se cure.

El perejil con agua es otro de los remedios naturales que se pueden preparar. El perejil tiene potasio, calcio y fósforo, y favorece la eliminación de los gases. Es un excelente diurético y muy eficaz para el alivio de otros males del estómago.

Una dieta blanda que no sobrecargue el estómago, especialmente una astringente, es muy importante en su cuidado mientras se recupere. El consumo de ciertos alimentos nutrirá, pero estimulando mínimamente la digestión, sin que el estómago haga un esfuerzo extra.

Son recomendables los siguientes alimentos y comidas: pan tostado; arroz hervido con zanahoria cruda o hervida; pollo hervido o al horno; pescado hervido o al horno; manzana al horno o pera cocida; yogur líquido descremado y determinadas infusiones ya indicadas.

Evitar lo siguiente: salsas; comidas fritas o muy condimentadas; comidas picantes; embutidos; mantequilla; margarina; especias; refrescos; bebidas alcohólicas y café.

Para terminar, os presentamos una de las recetas más eficientes para la gastritis:

El Agua de Arroz reduce la inflamación, el dolor y los gases, además de ser muy rica en minerales y vitaminas. Contribuye a detener los jugos gástricos y a calmar el dolor.

Para preparar este sencillo remedio solo tienes que hervir un litro de agua y añadir 150 gramos de arroz. Llevarlo a ebullición hasta que el agua se vuelva blanco. Cuando esto suceda, retirar del fuego y colar. Después, dejar enfriar el líquido resultante hasta que tome la temperatura ambiente. Beber a lo largo del día.

¡Esperamos que estos conocimientos os hagan la vida más saludable y feliz!